¿Qué estás haciendo aquí? ¿Por qué has empezado a leer este artículo? ¿Es que no has visto el título del mismo? Una peli de zombis dirigida por R. Rodriguez. ¿Qué pasa? ¿Necesitas más? Pues justo debajo te he colocado el poster oficial en el que aparece una tía buena con una metralleta por pierna. ¿Todavía no te has ido corriendo a verla? Ya te vale, majete. No sabes lo que te estás perdiendo.
¿Eres, sin embargo, de los que prefieren que una película te cause emoción, llores, vibres con los personajes y demás gafapastadas? Pues lo siento por ti chaval/a.
¿Eres, sin embargo, de los que prefieren que una película te cause emoción, llores, vibres con los personajes y demás gafapastadas? Pues lo siento por ti chaval/a.
Aquí no hay más cera que la que arde: historia sin sentido, frases chulas, diálogos chapuceros, prota macarrilla y tía buena de armas tomar (en la pierna, concretamente), sangre a borbotones, granos de pus explotando cada dos por tres, acción por un tubo...
Piensa, si quieres, que no es lo que a ti te va, que no es esa la clase de película por la que pagarías por ver. Ahora, relájate. Piensa en verde, que diría el otro. Baja al videoclub, corre, sube a casa y, sin más dilación: dale al play.
Si, aún hay una parte de ti que se siente incómod@. No, no es este el cine que te gusta. Tu cine lo firman los Von Trier, Coixet, Medem y demás:
"¿Qué es esto? ¿Por qué hay un tío que se dedica a coleccionar los testículos de otro? ¿Por qué estaban follando, se ha cortado la escena, y ahora el bar está ardiendo? Esto no tiene pies ni cabeza. Así hago yo también una película...."
Dices mientras tu boca esboza una sonrisilla. Mientras no puedes dejar de mirar, y durante apenas hora y media o dos horas te olvidas de todo, y simplemente disfrutas de esta macarrada que no pasará a los anales de la historia (ni falta que le hace), pero que divertida es un cacho.
Piensa, si quieres, que no es lo que a ti te va, que no es esa la clase de película por la que pagarías por ver. Ahora, relájate. Piensa en verde, que diría el otro. Baja al videoclub, corre, sube a casa y, sin más dilación: dale al play.
Si, aún hay una parte de ti que se siente incómod@. No, no es este el cine que te gusta. Tu cine lo firman los Von Trier, Coixet, Medem y demás:
"¿Qué es esto? ¿Por qué hay un tío que se dedica a coleccionar los testículos de otro? ¿Por qué estaban follando, se ha cortado la escena, y ahora el bar está ardiendo? Esto no tiene pies ni cabeza. Así hago yo también una película...."
Dices mientras tu boca esboza una sonrisilla. Mientras no puedes dejar de mirar, y durante apenas hora y media o dos horas te olvidas de todo, y simplemente disfrutas de esta macarrada que no pasará a los anales de la historia (ni falta que le hace), pero que divertida es un cacho.
que guapa está la peliii,te lo pasas super bieeenn
ResponderEliminarque tono mas guay le has dao a la entrada tio jejejeje
me ha encantado el artículo!
ResponderEliminara mi me encanta y cuantas más veces la veo, más la disfruto, ya sabes, es
muy de mi estilo! jejeje