Live at Knebworth



El 30 de Junio de 1990 en Knebworth (Hertfordshire), para ayudar al centro de terapia musial (musicoterapia) Nordoff-Robbins para niños discapacitados y para la Brit school, se reunieron en un legendario evento, muchos de los grandes artistas del Rock Británico. Acudieron más de 120.000 fans de todas partes del mundo… un concierto histórico…

El espectáculo comenzaba con la actuación de Tears for Fears, a pesar de la lluvia, aquello estaba a rebosar y nada mejor que uno de los mejores grupos de New Wave para comenzar… nada menos que con Change, una gran canción, aunque algo paradita, quizá debieron empezar con algo más contundente. Aun así, demostraron ser grandes, un directo envidiable. Con Badman’s Song se metieron al público en el bolsillo, su lado mas Jazz salió a la luz y sobre todo destacar el precioso duo con la pianista… fabuloso. Para terminar su actuación, eligieron una de sus canciones más conocidas Everybody want’s to rule the world; muy fresca, pegadiza y de ritmo optimista, un ambiente inmejorable. Broche de oro para su actuación!




Cliff Richard & The Shadows eran los siguientes en salir a escena, muy colorista y llamativo. Aquello prometía, buenos músicos, mítico cantante, sencillez, frescura, en su esencia y sin pretensiones, así fue On the beach, el tema elegido para arrancar. Lo mejor estaba por llegar con Good golly Miss Molly, Rock n' Roll en estado puro, como en los 60' pero en los 90', pudimos ver a un Cliff Richard emocionadísimo, dándolo todo y sin sacrificar voz, estaba en plena forma a pesar de su edad, genial. We don't talk anymore fue recibida con una ola de los fans, pasabamos de un Rock n' Roll a un ritmo más Beat. Divertidísima, llena de "buen rollo", contagioso a pesar de que lo vi en DVD!



Era el turno de Phil Collins & The Serious Band, que comenzó con in the air tonight... una esperada entrada, sereno, tranquilo, elegante, minimalista... y la pasión surge cuando se levanta y agarra con fuerza las baquetas y vemos algo impresionante, un maestro... Con Sussudio acababa su breve programa, una canción muy festiva, gran ritmo y melodía, destacar que la partitura del bajo era genial, breve sí, pero muy intenso.



Más larga fue la actuación de Paul McCartney, que comenzó con Coming up, ya estaba anocheciendo, la atmosfera era óptima, bonito juego de luces y una voz ya desgarrada... se mostró algo frío, o esa fue mi sensación, pero al fin y al cabo, es una leyenda de los escenarios... Birthday fue la siguiente canción, algo más animada que la anterior, pero el momento de la noche llegaría con la mítica Hey Jude, se nota el sentimiento especial tanto de McCartney como de los fans a esta canción, fue un momento mágico. El público ya estaba satisfecho y mucho más contento gracias a la actuación final... Can't buy my love, uno de los temas más animados, la mejor elección para acabar la velada!



Al día siguiente, los encargados de abrir el escenario de Knebworth fueron los geniales Status Quo, que personalmente, fue una de las mejores actuaciones del festival y es que están en plena forma y tienen un directo que supera a las grabaciones en estudio si cabe. Comenzaron con su mayor éxito, Whatever you want, Ritmo, buen ambiente, explosión de vitalidad... Mantuvieron esta sintonía también en Rockin' all over the world y Dirty water... Acabando con otra de sus canciones estrella: In the army now. ¡Fabuloso!



El siguiente en aparecer en escena era el Maestro Eric Clapton, que sóbriamente deleito a los fans con Before you accuse me y Tearin' us apart, demostró su genio en la guitarra y dejó claro por qué Slowhand es considerado uno de los mejores guitarristas de Rock de todos los tiempos.



Sin que Eric Clapton saliera del escenario, entraron Dire Straits con Mark Knopfler a la cabeza, Clapton se quedó con ellos para tocar temas como: Solid rock o Think I love you too much. Dire Straits espectaculares como de costumbre, con la humilde y marvillosa participación de Clapton, fue una combinación de maestros del rock inigualable... El repertorio de Dire Straits se cerraba con su éxito por excelencia Money for nothing:



El público no cabía en su asombro ante tal espectáculo... pero aún había más... era el turno de Elton John, siempre sereno en contraste con su estética ligéramente excéntrica. El momento más sentimental y romántico del día llegaba de su mano con Sacrifice, una de sus mejores baladas y con Sad Songs... dejaron al público emocionado al escuchar estas dos grandes canciones tocadas por tres grandes estrellas del Rock Británico. Era el fin de una jornada de música maravillosa.



Y el último día de este macro-concierto había llegado y el primero en actuar era el gran Robert Plant, voz de Led Zeppelin. La edad ya se notaba, trataba de ser el mismo, pero a pesar de que si fue una bonita actuación, se echaban de menos esas notas agudas a las que nos tenía acostumbrados, pero la pasión seguía teniéndola, y esto no se le puede reprochar. Además, dejando a un lado sus diferencias personales, a la guitarra pudimos ver a Jimmy Page en dos de las canciones, fue un "subidón" para todos escuchar de nuevo el electrizante sonido de Wearing & tearing y sobre todo Rock n' Roll, de las prodigiosas manos de Page.



Le tocaba a Genesis continuar el espectáculo y lo hizo con actuaciones como Mama o Throwing it all away. Volvíamos a tener a el gran Phil Collins sobre el escenario, en una actuación de tintes más rockeros y mucho más larga, pues la del primer día dejó a todos los que se trasladaron al festival con ganas de más. Lo mejor de su actuación, fue por supuesto el final. Turn it on again, una especie de remix de canciones tanto propias como de otras bandas de rock, las canciones que conformaron este remix fueron: Turn it on again(al principio y al final); Everybody needs somebody to love(The Blues Brothers); Reach out, I'll be there(Four Tops); Pinball Wizard (The Who) e In the midnight hour (Wilson Pickett).



Y la última actuación, la de los siempre brillantes y psicodélicos Pink Floyd, nadie mejor para poner fin a un gran festival que durante tres días reunióo a miles de personas y además con fines benéficos. Esta actuación fue simplemente maravillosa, no hay más descripción posible para este gran grupo que a día de hoy sigue ofreciendo espectáculo y calidad musical sin igual. Las canciones elegidas fueron únicamente dos: Shine on you crazy diamond, llena de sentimiento y Run like hell. La noche, las luces y las notas de Pink Floyd abrazaron al público. Un final inmejorable.



3 Responses
  1. Álvaro Says:

    precioso el concierto,no lo conocía hasta que he visto tu entrada y te he ayudado a hacerla.Que míticos artistas y que canciones tan populares,las he tarareado casi todas jajaja.
    Vedlo porque merece muy mucho la pena!!


  2. Anónimo Says:

    Hace ya años que deje la musica pop-rock a un lado para "descubrir" este otro.. MI GENERO MUSICAL con el que me identifico mucho mas , pero siempre es un placer recordar algunos de esos grandes exitos. Fabuloso post!! GRACIAS por ponerlo!! Menudo conciertazo!!


  3. Mamba Says:

    qué conciertazo!
    un placer ver tu estreno en el blog yayi!